martes, 27 de diciembre de 2016

Hasta siempre, antiprincesa

Ha muerto Carrie Fisher y con ella todo su brillante ingenio, su luminosa vitalidad y su estelar carisma. Hoy se ha apagado una estrella que comenzó a brillar en una galaxia muy, muy lejana. Hoy decimos adiós a un icono que marcó a varias generaciones coo sólo las leyendas pueden hacer al encarnar a la princesa Leia, un personaje estupendo y entrañable, pionera de las heroínas ficticias que años más tarde intentaron seguir su senda, modélica para mujeres reales que soñaban con otro mundo posible al margen del patriarcado y los convencionalismos machistas, única al reventar el tópico y manido arquetipo de "damisela en apuros" y reconstruirlo como una antiheroína que venía más a salvar que a ser salvada...y lo consiguió.

Hoy es imposible discernir dónde empezaba Leia y acababa Carrie porque ambas compartieron esa arrolladora personalidad capaz de hacerlas sobresalir en un mundo de hombres, ambas se deben mucho mutuamente y ambas tuvieron una vida tan azarosa como singular e interesante. Por eso, hoy, todos los fans de Star Wars, sentimos la pérdida de una pieza emblemática de ese puzzle llamado "cultura popular" como la de alguien cercano, porque al fin y al cabo Leia Organa forma parte de nuestra infancia y de nuestro imaginario y con ella Carrie Fisher. Todos quisimos salvar a esa princesa y conquistar su corazón hasta que nos dimos cuenta de que no necesitaba ser salvada y que era ella la que nos había conquistado a nosotros.

No obstante, es muy injusto simplificar la trayectoria personal y profesional de Fisher haciéndola orbitar únicamente en torno a la protagonista de La guerra de las galaxias porque la fallecida fue una buena actriz que no sólo hizo ESO (ahí está, por citar sólo una película, la divertida Escándalo en el plató) y, además, una interesante escritora y guionista. Dicho de otro modo: Fisher fue Leia pero no sólo Leia y esto conviene no olvidarlo porque lo contrario sería menospreciar el innegable talento que esta mujer tenía y que demostró, por ejemplo, en su "carta de despedida" a Leia.

En definitiva, este odioso 2016 vuelve, una vez más, a romper el corazón como quien quiebra una galleta. No puedo más que sentir auténtica pena por la muerte de alguien que formó parte de nuestros sueños y, desde hoy, de nuestra memoria. Descanse en paz, Carrie Fisher, ahora que Leia Skywalker ya es una con la Fuerza.   

2 comentarios:

Ramiro dijo...

Excelente!

Alfonso Guiard dijo...

Fisher es parte indisoluble de la generación que creció en los 70 y 80 y que vibró en 1977 con una extraordinaria fantasía galáctica con una princesa valiente, decidida y atractiva. Descanse en paz un trozo de mi vida