Con éste, son ya 500 los artículos que he publicado en este blog que comenzó como atalaya y hoy, más de seis años después, se ha convertido en el sitio de mi recreo, que diría Antonio Vega.
Quinientos posts dan para mucho. Para agradar y para irritar, para conmover y para aburrir, para construir y para destruir, para atacar y para defender, para reflexionar y para desvariar, para acertar y para fallar, para aprender y para corregir, para enseñar y para descubrir, para detenerse y para seguir adelante. Y es precisamente eso, seguir adelante, la mejor lección que puedo extraer de esta andadura de quinientas entradas.
Seguir
adelante no significa renegar del pasado sino querer el futuro. Seguir
adelante no significa ningunear los errores sino estar dispuesto a
convertirlos en lecciones. Seguir adelante no significa renunciar al
fracaso sino buscar el éxito. Seguir adelante no significa escapar de
los malos recuerdos sino esforzarse en crear otros mejores. Seguir
adelante no significa ignorar los fallos sino concentrarte en los
aciertos. Seguir adelante no significa huir de lo que eres sino luchar
por lo que quieres ser. Seguir adelante no significa arrastrar todo lo
que eres y tienes sino mejorar cuanto esté en tus
manos. Seguir adelante no significa esquivar los retos sino afrontarlos.
Seguir adelante no significa dejar de llorar sino estar dispuesto a
reír. Seguir adelante no significa dejar de quejarse sino buscar soluciones. Seguir adelante no significa dejar que te puedan los miedos sino las ganas. Seguir adelante no significa hacer lo que se espera de ti sino ir un paso más allá. Seguir
adelante no significa caer en la autocomplacencia sino en la
autocrítica. Seguir adelante no significa contentarse sino arriesgarse. Seguir
adelante no significa saber el qué sino el cómo. Seguir adelante no
significa estar convencido de no caer sino estar dispuesto a levantarse.
Seguir adelante no significa consentir sino saber cuándo rebelarse.
Seguir adelante no significa cambiar por cambiar sino cambiar porque te
sientes mejor. Seguir adelante no significa hacer nuevas preguntas sino
buscar nuevas respuestas. Seguir adelante no significa dejarte llevar
por la inercia sino recortar la distancia que te separa de tus sueños.
Seguir adelante no significa hacer las cosas distintamente sino hacerlas
mejor. Seguir adelante no significa correr sino recorrer. Seguir
adelante no significa repetirse sino reinventarse. Seguir
adelante no significa continuar escribiendo sino empezar a reescribir.
Seguir adelante no significa ir por el camino que te gusta sino
atreverte a ir por el que debes. Seguir adelante no es pensar lo que
quieres sino conquistar lo que mereces. Seguir adelante no significa
olvidar sino hacer. Seguir adelante no significa resignarse sino
atreverse.
Y eso es lo que pretendo hacer: seguir adelante. Espero que dentro de otras quinientas entradas pueda decir lo mismo porque significará que estaré haciendo bien las cosas, dentro y fuera de este blog que comparto con quien quiera detenerse un momento a leer.
Y eso es lo que pretendo hacer: seguir adelante. Espero que dentro de otras quinientas entradas pueda decir lo mismo porque significará que estaré haciendo bien las cosas, dentro y fuera de este blog que comparto con quien quiera detenerse un momento a leer.
2 comentarios:
Seguir adelante es, muchas veces, difícil pero cuando se consigue es muy gratificante. ¡Adelante y enhorabuena!
Salu2
Enhorabuena por esas 500 entradas, de calidad e interés.
A seguir así, y a hacer muuuuuuuuchas más.
Un abrazo
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